Información turística y práctica
PROVINCIA DE TERUEL – 785 km
5 – Calaceite _ Cretas _ Beceite – 30 Km
41.0183, 0.1896 – Calaceite
40.9304, 0.2109 - Cretas – Calle Castillo, 50 – Área de servicio gratis total.
Cretas - en catalán Queretes - Es un municipio catalanohablante de la provincia de Teruel, en la comarca de Matarraña que cuenta con una población de 556 habitantes.
Oficina Turismo = Pl. España, 5 - Ayuntamiento.
Parroquia de San Juan Bautista - El edificio que mejor define el perfil de Cretas, es sin duda su impresionante iglesia manierista dedicada a la asunción de Nuestra Señora. Pero está bajo la advocación de San Juan Bautista, hecho que a menudo provoca confusiones en su nomenclatura.
Se levanta en el siglo XVI, para sustituir a un templo anterior del siglo XIII. La iconografía de su portada es muy interesante. Sobre la puerta se representan las figuras de San Pedro y San Pablo ambas enmarcadas en círculos. Sobre ellas un friso con bajorrelieves representando la pasión y la muerte de Jesús. En el primer frontón sobre las cinco hornacinas, hoy vacías, se representa a Dios como padre eterno y un poco más arriba en el frontón superior, un nuevo relieve representando la coronación de la virgen por la trinidad. Durante la guerra civil sufrió un considerable expolio perdiendo gran parte de su decoración interior y exterior, que fue recuperando lentamente hasta 1983 cuando la iglesia de la asunción es declarada BIC.
Calle Mayor - Estamos en el mismo corazón de Cretas, ya que se trata de una de las calles más antiguas y con mayor importancia histórica. Entramos a ella pasando bajo el arco que se abre en la llamada Casa Sapera. Se trata de una antigua casa familiar del siglo XV, cubil de la familia Sapera cuyo miembro más ilustre fue el obispo Francisco Climent, también llamado obispo Sapera.
Calle de la Orden de Calatrava - Haciendo esquina con la Casa Sapera, muestra hermosas ventanas góticas y en el número 7, encontramos en la fachada una figura esculpida representando un soldado, posiblemente de la época napoleónica o carlista.
Casa Turull - La casa Turull es de una antigua familia cuyos miembros habitaron en Cretas en los siglos XVII y XVIII. Eran famosos constructores de edificios y de órganos para iglesias, teniendo en su haber, los órganos de Vilafranca, Tarazona, Zurita, y una larga lista entre los que destaca especialmente el de la iglesia de Morella.
Los Turull fueron promotores de la construcción de ocho de los más relevantes edificios de la población entre ellos, la Casa Huesa, la casa de Alfonso Celma y por supuesto, la gran casa señorial Turull, que nos ocupa, fechada en 1746 y con un espléndido balcón de ménsulas decoradas con forma de cabezas.
Tampoco podemos pasar por alto, la aportación de Felicísimo Turull a la hora de levantar la capilla de San Antonio de Padua, situada en esta misma calle en agradecimiento al santo por no haber sufrido percances durante la construcción de los edificios mencionados.
Plaza Mayor - El centro neurálgico y un auténtico crisol de la historia del municipio y su punto de reunión más destacado. Hoy en día se llama Plaza de España, como no podía ser de otra manera.
Su magnífica columna central de 1584, no estuvo siempre en la plaza, hasta bien entrado el siglo veinte estaba más allá de las murallas, cerca de la capilla de San Roque.
Vemos sobre la columna, el antiguo escudo de la población, con los signos que nos hablan de su larga historia: La cruz de la orden de Calatrava, fundadores cristianos de Cretas y señores de la misma hasta el siglo XV. El cordero pascual, símbolo eclesiástico posiblemente asociado al periodo de señorío del obispado de Tortosa, así como de las cuatro barras de la corona catalano-aragonesa que nos recuerdan su título de Vila real.
El resto de la plaza está formado por edificios nobles, de sillería, algunas existentes ya en el siglo XV y otras, como el actual ayuntamiento bastante más recientes en su construcción.
Capilla de San Antonio de Padua - Una de las características de los pueblos del Matarraña, son los portales Capilla, de los cuales y este dedicado a San Antonio de Padua en Cretas es posiblemente uno de los más representativos e interesantes.
Como sucede en otras localidades, este portal es en realidad un resto de las antiguas murallas que circundaban la población hasta el siglo XVI. A mediados del siglo XVIII se le añade la función de capilla, consagrándola en este caso a San Antonio de Padua, una figura muy reverenciada en la zona por su cualidad de patrón de las causas imposibles. A la capilla se accede por unas escaleras en uno de los laterales y la hornacina, hoy vacía, que probablemente guardó en algún momento una figura del santo protector. Fue Felicísimo Turull quien costeó las obras de la capilla en agradecimiento al santo por no haber tenido percances en la construcción de los ocho grandes edificios que manda construir en el Cretas del siglo XVIII.
Portal de San Roque - “La capelleta de Sant Roc, lo qui no acudirà la peste li agarrarà”. Un famoso y sencillo estribillo, aún a día de hoy cantado por los niños de Cretas. Como en otros lugares de la comarca, el poder de este santo es invocado como protección contra la peste, que Cretas sufrió a lo largo del siglo XVII y que motivó la construcción de esta capilla y el “hospital” que ocupaba el mismo edificio. Era un albergue para necesitados donde acudían los enfermos y los pobres, así como los heridos en tiempo de guerra y que se mantendría en funcionamiento hasta bien entrado el siglo XIX. Cabe resaltar que, hasta 1962, la columna que hoy en día se levanta en la plaza mayor estuvo situada a pocos metros de la capilla de San Roque en el exterior del antiguo recinto amurallado y donde hoy en día podemos contemplar el “monumento a la mujer” levantado en 1996.
40.8303, 0.1819 - Beceite – Calle Ronda, 5 – Parking mixto.
Beceite - El río Matarraña es el protagonista de la visita a Beceite. Y es que la ubicación de Beceite, en Els Ports, le ofrece un entorno natural privilegiado. Las montañas y bosques que lo rodean son espectaculares. Beceite fue declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1983.
El acceso al pueblo se realiza por el puente de piedra medieval sobre el río Matarraña. Puedes parar en uno de los miradores habilitados en la carretera para contemplar el cauce del río encajonado.
Fábricas de papel - En primer lugar, en la entrada del municipio descubrirás unas antiguas fábricas de papel reconvertidas, algunas en edificios de apartamentos turísticos. También como restaurantes. La arquitectura de los edificios le encantará.
Los molinos papeleros en Beceite tuvieron cierta importancia en España durante los siglos XVIII y XIX. Situadas junto al río Matarranya, las fábricas disponían del agua necesaria para generar energía y realizar la pasta de papel junto al algodón. Los fabricantes de cartas Fournier utilizaban la cartulina fabricada en las fábricas de papel de Beceite.
Font de la Rabossa - Al llegar a Beceite podrás disfrutar de su casco histórico. Deja el coche en las afueras de la población. Si viaja en autocaravana podrá aparcar en este mismo aparcamiento situado en el acceso, aunque no está permitido pasar la noche.
Iglesia de San Bartolomé - La Iglesia barroca de San Bartolomé fue construida durante los siglos XVII y XVIII sobre una iglesia medieval, de la que todavía quedan rastros. La fecha de finalización fue en 1726.
Durante las guerras Carlistas y la Guerra Civil fue expoliada y los retablos y el edificio sufrieron las consecuencias que todavía son visibles. La escultura que preside la portalada fue repuesta en 1973.
Ermita de Santa Ana - La Ermita de Santa Ana se encuentra en la entrada del pueblo y le gustará por su enorme pórtico cubierto antesala de la ermita. De estilo gótico-renacentista con modificaciones más tardías durante el siglo XVII y XVIII. Construida en piedra está perfectamente integrada en su entorno en el entramado de calles fuera del casco antiguo.
Portal de Sant Gregori - La antigua puerta de entrada a la localidad por el camino viejo de Vall-de-Roures. De origen árabe de cuando la población se llamaba Basáit fue uno de los portales de acceso a la población amurallada desde los siglos VIII al XIV.
Fue reformado en torno a la primera mitad del siglo XIV dando como resultado un portal apuntado de estilo gótico coronado en su clave por la media luna invertida hacia abajo que pertenece probablemente al primer arzobispo de Zaragoza, Pedro López de Luna. Su interior alberga la capilla de San Gregorio Papa.
40.8229, 0.1879 - R U T A D E L P A R R I Z A L