48.1795, 1.3881 - Bonneval

 

 

48.2974, 1.2453 - Illiers-Combray - Promenade de la fontaine – Pk ideal sombra y rio.

 

Illiers-Combray * - 3.197 habitantes – Esta comuna, está íntimamente ligada al del autor de «En busca del tiempo perdido». Aquí, en la casa de sus tíos, Marcel Proust pasaba sus vacaciones cuando era niño.

 

Illiers-Combray - Marcel Proust hizo que esta villa se convirtiera en famosa, ya que la describió con el nombre de Combray en su obra “À la recherche du temps perdu”. El 8 de abril de 1971 Illiers , como se denominaba hasta entonces, fue rebautizada «Illiers-Combray» por decisión del Ministro del Interior Raymond Marcellin con ocasión del «centenario del nacimiento de Marcel Proust». Es uno de los pocos villages franceses que han adoptado un nombre proveniente de la literatura.

 

El romántico jardín de Pré Catelan - Diseñado por el tío de Marcel Proust, es un lugar tranquilo, idóneo para pasear.

La casa de la tía Léonie se ha convertido en museo, y en ella los visitantes pueden contemplar una reconstrucción de las habitaciones antiguas y los recuerdos del famoso escritor.

 

 

48.3250, 0.8156 – Nogent-le-Rotrou - Rue des Viennes – Aire de camping-car – 7 € + 0.40 € / persona.

 

Nogent-le-Rotrou * - Capital de Perche, encantará al visitante por su rico patrimonio, en el que destaca el castillo medieval, que domina desde lo alto de su espolón rocoso el valle del Huisne. La fortaleza se compone de un torreón rectangular, una vivienda renacentista y un recinto flanqueado por torres, y alberga un museo de la historia del castillo y de Perche. Además de su castillo fortaleza, la ciudad posee hermosas casas antiguas que se pueden contemplar en las calles Bourg-le-Comte y Saint-Laurent.

 

En el fin de semana de la Ascensión (15 de agosto) se celebra una fiesta medieval denominada Percheval, en la que el caballo percherón es el gran protagonista.

 

Nogent-le-Rotrou se extiende a caballo entre el Orne, el Loir-et-Cher y la Sarthe. La ciudad de Nogent-le-Rotrou seduce, por supuesto, por su patrimonio arquitectónico, pero también por su patrimonio cultural, como los famosos caballos percherones, famosos en todo el mundo.

 

Premiada en el Concurso de Villages Fleuries, la localidad cuenta además con una naturaleza circundante de lo más verde, así como numerosos espacios verdes que hacen que el lugar sea encantador. La vegetación y los monumentos antiguos conviven maravillosamente para ofrecer a los visitantes una armonía estética.

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48.1816, 0.6517 - La-Ferté-Bernard – Av. du Général de Gaulle, 42 – Aire de camping-car gratis total.

 

La Ferté-Bernard * - La villa medieval de La Ferté-Bernard está agazapada a orillas del Huisne, en el corazón de la suave campiña de Le Perche-Sarthois. Con sus numerosos canales y sus bellas casas antiguas posee un encanto pintoresco. Una vez franqueada la imponente puerta de San Julián, vestigio de las antiguas murallas, conviene recorrer las calles de Huisne y Carnot y contemplar las magníficas fachadas con entramado de madera que jalonan el recorrido.

 

Église Notre-Dame des Marais - Observe la espléndida arquitectura del gótico flamígero de la iglesia de Nuestra Señora de las Marismas (siglos XV y XVI). En el interior, se puede ver un coro de estilo renacentista, unos magníficos vitrales de los siglos XV, XVI y XIX, un órgano "nido de golondrina" de 1536 y un tesoro de alabastro del siglo XV.

 

Y para descubrir la Pequeña Venecia del Oeste desde otra perspectiva, no hay nada mejor que recorrer los canales en barca (ahora es eléctrica) partiendo del embarcadero situado cerca de la oficina de turismo.

 

En el mes de mayo, La Ferté-Bernard acoge el festival Artec, famoso festival de las Artes y Tecnologías con competiciones de creaciones robóticas.

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Castillo de La Ferté-Bernard – Construido en el departamento de Sarthe a partir de 1023 según el testamento de Avesgaud, obispo de Le Mans y también hijo del conde de Perche. Inicialmente fue una fortaleza construida de tierra y madera.

Reconstruido en piedra, fue finalmente desmantelado muy rápidamente por orden del rey Carlos VI como reacción a la traición de su señor Pierre de Craon en 1392. Este último había intentado un golpe de Estado en París contra el soberano.

Actualmente, sólo quedan observables dos torres, elementos de las murallas y parte de la vivienda. Esto ha sido modificado considerablemente con el tiempo. Ahora se divide en apartamentos.

La ciudad, que sin embargo siguió siendo una fortaleza y fue sitiada por el Príncipe de Conti en 1590, conserva una puerta, conocida como Saint-Julien, construida bajo Luis XI (siglo XV). Con dos torres con cubiertas de pimentero y almenas unidas por un pabellón cuadrado, albergó el ayuntamiento desde 1704 hasta 1907. Entonces se instaló allí un museo, hoy cerrado.

El jardín del antiguo castillo está abierto al público durante las Jornadas del Patrimonio.

 

También podremos ver:

- Los mercados cubiertos

- Palacete Courtin de Torsay

- Puerta Saint-Julien

- Iglesia Saint-Antoine-de-Rochefort